¿Te gustaría saber cómo salir de tus deudas? La respuesta a mi pregunta es seguro un gran y enorme SI. Porque, ¿quién no quiere encontrar la libertad financiera? A todos nos gustaría deshacernos de ese peso que cada día se hace más grande y que nos impide avanzar financieramente.
Las deudas han sido por muchos años, una de las causas que impiden el desarrollo económico de una sociedad. Ya sea porque surgen situaciones que no pueden ser cubiertas rápidamente por falta de dinero, o porque los ingresos de por si son insuficientes para cubrir los gastos mensuales o solo por satisfacción instantánea, siempre existirá la posibilidad de endeudarnos.
El problema con las deudas se basa en su facilidad de incrementarse y complicarse a medida que pasa el tiempo. Mientras, a su vez, se te va siendo imposible pagarlas todas. Por lo tanto, es importante buscar soluciones oportunas y eficientes para evitar caer en una espiral de deudas que, a la larga, te pueden ocasionar problemas no solo en tu entorno familiar y social, sino también con tu salud.
Salir de las deudas no es fácil ni sucede de un día para otro, sin embargo, es posible. Es por ello que en este post te enseñaré una serie de pasos que te guiarán a reconocer aquellos gastos innecesarios que puedes recortar para obtener más ingresos, así como la forma en que debes administrar ese dinero para salir rápidamente de las deudas.
¿Por qué adquirimos deudas?
Con la invención de la moneda, no solo se fortaleció el comercio de esa época, sino que también dio paso a nuevas formas de pago que conllevaron a que las personas se introdujeran en una espiral de deudas que originó el quiebre financiero de muchas naciones y que hoy en día, sigue siendo el problema económico de muchas sociedades.
Pero, ¿Cómo llegamos a conseguir una deuda? Nuestro deseo de adquirir nuevos productos, ya sea por necesidad o por gusto, ha llevado a que busquemos los recursos monetarios que tal vez no tengamos en ese momento para satisfacer dichos deseos, ocasionando así las dolorosas deudas.
Esta imperiosa necesidad de consumo se fortalece a medida que vamos creciendo por la alarmante falta de educación financiera que las entidades educativas nos han privado. De manera que nuestra edad adulta se ve fuertemente golpeada por la realidad económica, al no saber cómo pagar aquellos gastos que nos permitan vivir cómodamente.
Esto ocasiona que nos dejemos llevar por los engañosos créditos financieros. Aunque te solventan la crisis del momento, te envuelven en una serie de deudas que se van incrementando en el tiempo hasta llegar al punto de no poder pagarlas.
Por lo tanto, al tener un déficit de conocimiento sobre el manejo de nuestros ingresos, se nos impide establecer objetivos financieros que nos permitan alcanzar la libertad económica deseada.
Esta ignorancia nos obliga a vivir en un estado de piloto automático que nos lleva a tomar decisiones financieras de forma inconsciente, hecho que es aprovechado por los vendedores profesionales al bombardearnos con sus productos repetidamente para adquirir más y más. Creando así una espiral de deudas que crece a un ritmo exponencial.
Las deudas no nos permiten conseguir nuestros objetivos
Siempre he pensado que la perseverancia, el esfuerzo y la disciplina, son elementos importantes para conseguir nuestros objetivos, ya que se ha comprobado que la mente juega un papel indispensable a la hora de trabajar por un fin. Sin embargo, existe un elemento económico que influye de manera negativa en el proceso de lograr nuestros objetivos: las deudas.
Cuando tenemos deudas, todos nuestros pensamientos se enfocan solo en tratar de solucionarlas lo más pronto posible. Por lo tanto, ese se vuelve nuestro principal objetivo y los demás son dejados de lado hasta que logremos cancelar todas las deudas.
El detalle es que no sabemos el tiempo que pueda llegar a transcurrir antes de solventar la primera deuda. Así que, el tiempo sin soluciones con pensamientos de fracaso, pueden llegar a afectar no solo nuestra salud física al incrementar los estados de estrés y ansiedad que de por si acompañan a las deudas, sino que también afecta directamente nuestra salud mental.
1. Cambia tu forma de pensar
Jamás saldrás de tus deudas si no cambias tu forma de pensar. Sincerarte sobre tu situación financiera es lo primero que debes hacer para comprender la gravedad del problema y lo importante que es solventarlo rápidamente.
Sé que enfrentar la realidad de tu problema no será fácil, surgirán emociones que te llevarán a cuestionarte el porqué de tus decisiones al gastar tanto y no controlar lo que consumías. Pero es el choque que necesitarás para entender cómo estas manejando tus ingresos y saber en dónde puedes hacer los cambios pertinentes.
Ver todo este panorama te ayudará a ser menos indiferente con tus deudas y a tomar cartas en el asunto al buscar asesoría financiera que te permita salir poco a poco de la espiral de deudas en la que te has sumergido.
Así que no es momento de dudas ni incertidumbres, sigues pensando que todo se solucionará a su debido tiempo. Creer que tendrás éxito al final del camino, te llena de la seguridad que te permitirá obtener los resultados deseados.
2. Apunta todas las deudas que tengas, por muy pequeñas que sean
Luego de reconocer que tienes problemas con las deudas y pensar que debes hacer algo al respecto, es momento de actuar. ¿Pero, por dónde empezar? Antes que nada, debes reconocer cada una de tus deudas.
Así que, si quieres saber cuál es el monto total de tu deuda, busca por tu casa todas las facturas de tus tarjetas de crédito y los documentos que estén relacionado con algún crédito bancario que te hicieron. Incluso aquellos préstamos con arreglos verbales que hiciste con amigos o familiares. Todas esas deudas, por más pequeñas que sean, anótalas.
Debes escribir lo más detalladamente posible, toda la información referente a cada una de las deudas. Desglosarlas te permitirá comprender la magnitud del problema y te ayudará a establecer las siguientes pautas a seguir en cada una de ellas.
Cómo apuntar tus deudas
Puedes colocar los datos que más creas conveniente, pero la información que no debería faltar en tu listado será la siguiente:
¿Cuál es la deuda?: Escribe el nombre de la deuda, por ejemplo, “créditos por el automóvil”.
¿A quién le debes?: Coloca el nombre de la persona o entidad financiera que te prestó el dinero.
¿Cuál es la cantidad total de la deuda?: Sumarás todas las deudas y vas a colocar el valor total de tu deuda.
¿Cuáles son tus cuotas mensuales?: Cuál es la cantidad de dinero que debes abonar mensualmente a tu deuda para cerrar el pago.
¿Cuál es la tasa de interés a pagar?: Debes añadir el porcentaje que tienes que pagar mensual o anualmente por ese préstamo.
¿En qué tiempo debes pagar la deuda?: Independientemente si estás empezando a pagar la deuda, escribe los meses que te faltan para cerrarla pagando las cuotas normales.
¿Por qué obtuviste la deuda?: Es importante saber la razón que te llevó a adquirir la deuda inicialmente para evitar que ocurra de nuevo.
3. Anota los ingresos y gastos que tengas
Para tener un mejor control de tus finanzas, debes saber exactamente en qué gastas el dinero que ganas. Tal vez este punto lo creas innecesario. Pero muchas veces las mayores deudas se originan de gastos pequeños que se van acumulando con el tiempo hasta convertirse en un gran problema. El motivo: porque gastas dinero que en realidad no ganas.
El objetivo de escribir las entradas y salidas de tu dinero, es que puedas distinguir cuáles son los tipos de gastos que realizas y logres recortar aquellos que son innecesarios. Al eliminar algunos gastos al mes, podrás ahorrar lo necesario para cubrir algunas deudas.
Una manera fácil de decidir qué gastos recortar, es clasificándolos en 3 categorías: indispensables, necesarios y anhelados.
Los gastos indispensables son aquellos que son vitales para tu día a día (comida, alquiler de la casa, pagos de servicios, medicinas, etc.).
Los gastos necesarios son aquellos que requieres para sobrevivir, pero puedes prescindir de ellos por un tiempo (ropa o calzado nuevo, membresía al gym, etc.).
Mientras que los gastos anhelados, son aquellos que no necesitas para vivir, pero son gustos que mejoran tu estilo de vida (salidas con amigos, vacaciones familiares, televisión por cable, etc.):
Una vez que hayas catalogado los gastos, debes decidir cuáles son los anhelados o necesarios que puedes eliminar para que ese dinero se pueda transferir a tus deudas y puedas pagar algunas de ellas. Quizás no tengas que recortarlos todos, pero decídete por aquellos gastos que te ayuden a cubrir la cuota total de tus deudas en el menor tiempo posible.
4. Busca formas de generar ingresos extras
Si tu método actual para generar ingresos no te está generando el dinero suficiente para cubrir tus deudas, es momento de buscar otras formas de ganar dinero. No importa si tienes que trabajar más de la cuenta, lo importante en este momento es saldar todas tus deudas en el menor tiempo posible. Recuerda, tu objetivo es la libertad financiera, y eso no lo conseguirás sin hacer nada.
Pero, ¿crees que no tienes tiempo para buscar otro trabajo o piensas que no sabes hacer más nada de lo habitual para generar ingresos extras?. Tranquilo. Hoy en día existen muchas formas de generar dinero en tu tiempo libre sin tener ninguna experiencia.
Internet te ofrece una variedad de actividades que puedes realizar desde tu casa cuando tú quieras. Así que es hora de que seas proactivo en el asunto y busques la opción que sea más adecuada para ti.
5. Empieza a crear tu fondo de emergencia
Muchas veces, esta espiral de deudas inicia cuando se nos presenta una emergencia. Tenemos que solventar rápidamente un gasto con un dinero que no tenemos. Es por ello que un fondo para emergencias te puede ayudar a evitar nuevas deudas mientras tratas de pagar las antiguas.
Quizás no sea fácil crear un fondo de emergencia cuando no tienes nada de dinero, ¿porque si tuvieras dinero, pagarías tus deudas no?. Entonces, ¿cómo salir de las deudas sin dinero?. Para ello, debes abonar dinero desde dos fuentes de ingresos: reduciendo tus gastos o aumentando tus ingresos.
Cada una de estas formas de obtener dinero lo hemos explicado en los puntos anteriores, así que ya puedes iniciar con tu colchón salvavidas. Pero si logras combinarlos, alcanzarás a cubrir todas tus deudas en el menor tiempo posible.
Por otro lado, otra forma de ir creando tu fondo de emergencia es transferir el 50% de todos tus ingresos extras a esta cuenta. Así sea una cantidad mínima de dinero, pero a la hora de la verdad, cualquier suma de dinero te ayudará a amortiguar los gastos imprevistos que surjan.
6. Aplica métodos para salir de deudas:
Método bola de nieve
Es el método más famoso para eliminar las deudas. Se origina a partir de los resultados de un estudio realizado por varios estudiantes de Harvard Business Review. Consiste en saldar primero las deudas más pequeñas, en vez de priorizar aquellas deudas con altas tasas de interés.
Sé que suena ilógico no salir primero de las deudas más grandes, pero por algo este es el método más exitoso.
Así que, ¿cómo funciona?
Una vez que hayas realizado la lista de todas tus deudas, debes ordenarlas desde el monto más pequeño hasta el más grande. A su vez, debes organizarlas según el tiempo del pago, colocando en primer lugar las deudas que debes cancelar pronto.
Después de haber reducido los gastos innecesarios de tus ingresos regulares, te debe sobrar un dinero extra suficiente para cubrir las cuotas mínimas de todas tus deudas, así como para abonar una gran parte en la cancelación de la deuda más pequeña.
De esta forma continuarás hasta cancelar en su totalidad la primera deuda de tu lista y continuar con la segunda deuda. Luego, el dinero extra que has venido ingresando se suma con la cuota que solías abonar a la primera deuda para obtener un saldo mucho mayor y así cancelar la segunda deuda de la lista.
Este ejercicio lo practicarás sucesivamente, logrando así una suma de dinero mucho más grande para pagar tus otras deudas a medidas que cierras las deudas anteriores: similar a una bola de nieve. Este método no solo te permitirá pagar tus deudas mucho más rápido, sino que también te aportará el impulso mental que necesitas para continuar con tus objetivos al sentir satisfacción y confianza por haber cerrado una deuda.
Método cascada
Esta forma de pagar las deudas se basa en una técnica opuesta al método anterior, ¿en qué sentido?. El método cascada consiste en ordenar tus deudas desde las que tienen la tasa de interés más alta hasta la más baja, por lo que pagarás primero tu deuda más grande y continuarás hasta la deuda más pequeña.
Igual que el método bola de nieve, parte de tus ingresos extras mensuales estarán destinadas a pagar las cuotas mínimas de todas tus deudas y, el resto, será para pagar la primera deuda de la lista.
El objetivo de ordenar las deudas de esta forma, es tener más dinero a la hora de pagar las otras deudas una vez que finalices con la primera de la lista, mientras ahorras meses de interés elevados al eliminarlas primero.
Lo malo de este método es que requiere compromiso y motivación para continuar con tus pagos mínimos por mucho más tiempo, ya que las deudas no se pagarán tan rápido como el método anterior; por lo que es posible que te desamines en el proceso.
Conclusión
Las deudas son limitaciones que siempre estarán presentes en nuestra evolución financiera, ya que son tan fáciles de obtener que generalmente estamos envueltos en ellas. Por lo tanto, es importante que aprendamos a identificarlas, a sobrevivir con ellas, a superarlas y, sobre todo, a evitarlas.
Una vez que conozcas con claridad tu nivel de endeudamiento, podrás analizar todos los factores que te llevaron a depender de los créditos rápidos y te condujeron por esa espiral de deudas del cual te cuesta salir.
Para todo hay una solución, así que no te desanimes. Una de las muchas formas que existe para salir de las deudas será la adecuada para ti, permitiéndote ahorrar el dinero suficiente para pagar las deudas y lograr tu libertad financiera.
Referencia: 123dinero.com
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